Exploro este centro de tierras marronas
de sabores secos en sintéticos aromas.
Te atraigo a propósito y le agrego empeño,
despunto el ritual al recrear tu seño
Vienes arribando en recortes mudos,
tenue te estructuras,
frágil como en naipes
tratas de encenderte mas obtienes humo,
la brisa te expande sobre este paisaje.
Fénix anticuario de mi pasado distas
en prófugos minutos tu solidez concluyes
emanas destellos hoguera concisa
contundente sismo que el presente incluye.
Ahora manantiales tienen la ventaja
al recorrer mi rostro el líquido que ebulle
en pena me disculpo por empujarte a muerte
acepto sin excusas si de mi espectro huyes.
Cuánto me regaño sabiéndome ridículo,
crédulo dependiente de este infiel vehículo
que no dará vuelta a todo un hemisferio
para en misma ocasión otra vez ponernos.
Sin opción asumo lo que aguarde en frente
rechazo a raíz lo que a mi espalda acecha
escojo lidiar con perenne corriente
que en mi infantil coraje dejara una brecha
¿Serás lo contario?
¿vendrás a encarcelarme?
Con esa ras virtud que me atrajo contento.
Procura consiga volver a enamorarme,
no hallaré en látigo sempiterno escarmiento.
Si al rogarte un beso lo hubieras negado
o al creerme ladrón te hubieras apartado
flotaría en la aurora del vacío vitalicio
no sabría a hedor de rígidos juicios
No menudo reto jugar a descifrar
los mínimos mensajes de tu fugaz mirada
temiéndote capaz de tu estampa guardar
creyéndote abusar de tanto que me agradas.
Fueron ataduras, en versos lo confiesas
incitada cordura cual el triunfo tropieza.
La historia no culmina hasta que endeudadas
éstas dos ardillas se crucen en las ramas
inicien la disputa que de antojos priva,
cerrando revolcadas en emergentes llamas.
👍👍
Me gustaMe gusta